La laminitis es una enfermedad que afecta a los caballos de cualquier raza o edad y que consiste en la inflamación de la lámina sensitiva, que les genera intensos dolores y cuyos mecanismos metabólicos e inflamatorios están conectados con el desarrollo de lesiones laminares (1). Durante la última década se han producido importantes avances en el conocimiento, con la consiguiente disponibilidad de nuevos medicamentos con mayor eficacia y menores efectos secundarios. Actualmente se dispone de diferentes tratamientos que incluye descanso, radiografías que permitan monitorear el grado de rotación de la falange, buena alimentación baja en carbohidratos, suministro de nutrientes necesarios para el crecimiento del casco como vitaminas, minerales y lisina. Uso de medicamentos como desinflamatorios, analgésicos, entre otros que serán determinados de acuerdo al criterio del médico tratante(2). Ante las múltiples posibilidades que se han ido desarrollando, el manejo del animal con laminitis debe ser individualizado y, sobre todo, se debe determinar la etiología primaria para que pueda ser tratada simultáneamente.