A pesar de que la electricidad es fundamental para la sociedad, gran parte de la población mundial no tiene acceso a este servicio. El reto de electrificación a través de un sistema de interconexión resulta en gran medida inviable, debido a los grandes costos de inversión y operación. Como consecuencia de esto, la mayoría de las zonas rurales deben implementar pequeñas plantas de generación de energía eléctrica a base de Diésel, las cuales son de altos costos y además contaminantes para el medio ambiente. Con el fin de solucionar este inconveniente, en este proyecto se propone una metodología que permita diseñar redes de energía eléctrica para zonas rurales o aisladas de una red interconectada, considerando recursos energéticos distribuidos como generación fotovoltaica y elementos almacenadores de energía.